El director de arte de Blizzard, Samwise Didier, ha anunciado su marcha de la compañía norteamericana.
Didier comenzó a trabajar en Blizzard en 1991, cuando el estudio se llamaba Silicon & Synapse, habiendo trabajado en proyectos clásicos como Blackthorne o The Last Vikings o en los más recientes Overwatch 2 o Diablo IV.
En el mensaje que ha publicado en sus redes sociales explica que «Blizzard nunca fue solo un trabajo para mi» y que la considera su «segundo hogar». Allí «aprendí arte, aprendí a usar un ordenador, aprendí Photoshop, aprendí a hacer interfaces e hice miles de botones. Aprendí a crear modelos 3D de mi arte, a aplicarles texturas y animarlos, incluso a hacer que disparasen bolas de fuego y láseres».