El estudio responsable de Ruiner, Reikon Games, ha anunciado su próximo juego.
Su título provisional es Final Form y se trata de un shooter en primera persona con ambientación de ciencia-ficción, en el que encarnamos al avatar humanoide de una nave con consciencia, que tiene como misión ir más allá de los confines del universo conocido para acabar con una plaga que amenaza a toda la vida.
Magdalena Tomkowicz, la cofundadora de Reikon, explicaba que «hacer este juego es como volver a nuestras raíces. Final Form se ha estado cociendo durante mucho tiempo, inspirado por nuestra pasión por explorar lo desconocido y nutrido por trabajos artísticos que contemplan posibles futuros para la humanidad, la civilización y todo lo que hay más allá».