
Esta semana asistimos a la presentación final de Knockout City, el multijugador de balón prisionero desarrollado por Velan Studios y publicado por Electronic Arts dentro del sello EA Originals. El evento se abrió con una hora de charla de la mano de David Nathaliesz (General Manager), Karthik Bala (CEO) y Jeremy Russo (Director) para explicarnos qué tiene de especial este título que lleva más de cuatro años en desarrollo. Bala nos comentó que la beta abierta había tenido un millón de descargas y que eso les alegraba porque creen que es un juego que solo se entiende por completo cuando lo tienes en las manos, algo que pudimos comprobar de primera mano tras la presentación. Russo estuvo un buen rato presentando las numerosas mecánicas pero es cierto que las posibilidades de Knockout City no se entienden del todo hasta que tienes el mando en las manos.
Vamos a lo básico: estamos en un mundo donde las disputas se resuelven en partidas de balón prisionero. En las partidas, generalmente de 3v3, tenemos que encontrar balones por el escenario y acertar con ellos dos veces a los rivales para sumar una baja. A partir de ahí empieza un despliegue de mecánicas: podemos cargar el balón para darle velocidad, podemos darle efecto curvo (en horizontal o vertical), amagar lanzamientos, realizar una especie de parry para recoger los balones que nos lanzan, embestir a otro jugador para quitarle el balón de las manos, convertirnos en una bola para que nos lance un compañero y conseguir un KO automático o incluso cargar a un compañero para que aterrice con una explosión que puede eliminar a varios rivales.
Tras unas primeras partidas en las que íbamos un poco perdidos (no tuvimos tiempo para probar las misiones de entrenamiento), la cosa cogió ritmo en cuanto pudimos acomodarnos a unas dinámicas más cercanas a las de un juego de lucha que a las de un shooter. La puntería da bastante igual, ya que el apuntado es automático, y lo importante es aprender el timing de cada acción, saber posicionarnos para que el equipo rival no pueda rodearnos y aprender a leer las intenciones al rival para contrarrestar sus ataques. Las acciones que indicábamos antes nos permiten utilizar multitud de herramientas para tratar de salir con vida de cada situación sin resultar agobiantes.