No voy a dulcificar esto. Este es uno de los juegos más salvajemente ambiciosos que he probado nunca, y no es sólo que la mayoría de la gente no conozca de su existencia: es que, si lo hicieran, les daría absolutamente igual.
No voy a dulcificar esto. Este es uno de los juegos más salvajemente ambiciosos que he probado nunca, y no es sólo que la mayoría de la gente no conozca de su existencia: es que, si lo hicieran, les daría absolutamente igual.