Microsoft va a despedir esta semana a 1.900 empleados de su división de videojuegos.
Aunque no se han especificado todavía los datos exactos, parece que los despidos afectarán principalmente a Activision Blizzard, pero también habrá pérdida de empleos en Xbox y en Zenimax.
Estos despidos suponen un ocho por ciento de la plantilla actual de la división de videojuegos de Microsoft, la cual contaba hasta hoy con 22.000 empleados en todo el mundo.