
El servicio de juego en la nube de Microsoft, Xbox Cloud Gaming, tomará como base a partir de ahora el hardware de Xbox Series X.
Según le explica la empresa a The Verge, el cambio se ha completado recientemente (se anunció a finales de junio), y eso significa que tendrá la capacidad de retransmitir mayores tasas de fotogramas y tiempos de carga más reducidos.