Los desarrolladores de The Sinking City han pedido a los jugadores que no compren su juego en Steam.
Es una situación cuanto menos curiosa, pero que tiene una explicación bastante obvia. El estudio ucraniano retiró The Sinking City de la venta tras presentar una demanda contra Nacon, su distribuidora. En ella alegaban el impago por los hitos en el proceso de desarrollo y de cerca de un millón de dólares en royalties.
¿Y qué tiene que ver la versión de Steam con esto? Pues que fue publicada el viernes por Nacon, sin el consentimiento de Frogwares aunque con el beneplácito de la justicia francesa, la cual dictaminó en octubre que el estudio había actuado de forma ilegal al retirar el juego, ordenando que se tomaran más acciones de ese tipo hasta que la disputa con Nacon estuviese resuelta.
